Tras
tres intentos fallidos en busca de mi medalla número 35, volveremos a
intentarlo. En este sentido, se abre otra ventana para participar en mi próximo
42k: se trata del Maratón de New York, para el mes de noviembre de 2014, por
supuesto también condicionado.
Y es que lamentablemente los intentos que hice para correr en los maratones de Buenos Aires (octubre 2013), CAF-Caracas (febrero 2014) y Boston (abril 2014) no se pudieron concretar, aun cuando ya me encontraba inscrito en cada una de esas competencias.
En el caso de la CAF, debido a las manifestaciones originadas por la grave crisis política, económica y social que se vive en nuestro país, desde febrero de este año, situación que obligó a los organizadores del maratón posponer el evento hasta abril del 2015. Y, en el caso de los otros dos, lamentablemente, a los venezolanos se nos ha hecho cada vez más difícil conseguir divisas y boletos para viajar al exterior.
De igual forma, la venta de boletos internacionales continúa paralizada entre un 80 y 90%, no hay pasajes disponibles para la gran mayoría de los destinos porque las tarifas están congeladas. Y para colmo, la mayoría de las líneas aéreas han disminuido la cantidad de vuelos internacionales desde Venezuela.
Las líneas aéreas han manifestado que no presentarán nuevas tarifas hasta que el Gobierno cancele la deuda completa. Así que, la reactivación de la disponibilidad de boletos aéreos solo será posible si el Gobierno cumple con el pago de la deuda, de eso dependerá la recuperación de las frecuencias perdidas y la reanudación de la venta de boletos en conjunción (pasajes para conexiones). Si el gobierno no cumple con eso, la situación seguirá igual.
A la luz de este panorama resulta insólito e increíble que para los venezolanos sea más fácil conseguir un cupo para correr el Maratón de New York que conseguir un boleto aéreo para viajar a esa ciudad; en mi caso me encuentro desde mayo, semana a semana, en una búsqueda exhaustiva para ver si consigo un pasaje aéreo para la ciudad de New York. Hay que estar pendiente casi “las 24 horas del día” para ver si las aerolíneas abren los cupos.
Muchos pasajeros compran directamente sus boletos con las aerolíneas, pero el pago es en dólares, otros viajan a sus destinos a través de conexiones con otros países, pagando también estas conexiones en dólares, pero no todos tenemos esa posibilidad.
En otro orden de ideas, durante este tiempo he tenido suficiente espacio y oportunidad para realizar grandes cambios en mi rutina, entre ellos la combinación de un nuevo método de entrenamiento. Y es que desde el mes de marzo me uní al Club de Corredores Cuatro Elementos, @4ElementosClub, dirigido por el experimentado Coach Orlando Velásquez, y de verdad les confieso que ya llevo cuatro meses con ellos y mi transición y adaptación ha sido fenomenal, me gusta el estilo de trabajo, los sitios donde entrenamos, las rutinas, el plan de entrenamiento y las personas que integran el team.
En términos generales, desde que comencé a entrenar con este club, cada día me siento mejor y súper agradado de pertenecer a esta gran familia de corredores, además, me siento muy feliz y motivado, y, mis condiciones ya comienzan a dar señales positivas sobre estos cambios.
Una
de las grandes virtudes de este Team es que el grupo de gente que lo conforman,
son personas magnificas, entusiastas, alegres, optimistas, humildes y solidarias,
que más que un grupo forman una auténtica familia, y como todo buen equipo,
entre todos nos aupamos y nos ayudamos dándonos ánimo, para mejorar y para exigirnos cada día un poco más, sin dudas, que es un honor correr con ellos.
Asimismo, el programa de entrenamiento que dirige Orlando se adapta al nivel de cada persona y de sus objetivos. Por estos motivos, lo recomiendo ampliamente, sobre todo para aquellos corredores que están entrenando sin dirección alguna, para los que desean prepararse para correr un maratón, para los que quieran dar los primeros pasos y tomarle el gusto a correr o en su defecto para aquellos que quieran mejorar sus marcas, acá encontraras esa asesoría y apoyo.
Adicionalmente, inicié un plan de acondicionamiento y mantenimiento físico, incluyendo terapias de masajes, con el profesor Nelson Plaza y por primera vez decidí probar y contar con la asesoría de un nutricionista deportivo.
Por supuesto las trotadoras quedarán como Plan B, para aquellos días que por las condiciones climáticas o por limitaciones de tiempo no pueda realizar mi entrenamiento con mi equipo. Aprovecho para comentarles que siempre vi a las trotadoras como una excelente opción, teniendo entre sus ventajas que no necesitas llevar un reloj para medir el tiempo o la distancia, puedes ajustar la distancia y/o el tiempo, el ritmo o la velocidad de acuerdo a las series que vayas a realizar, variar la inclinación, ver las pulsaciones, ver una película, escuchar musica y puedes correr en un ambiente tranquilo, privado y seguro.
Sé que para muchos correr en la cinta es realmente aburrido, también conozco a muchos buenos corredores, cuyos ciclos de entrenamientos son realizados casi por completo en estas bandas, entre ellos a Rafael Aznar quien lleva varios sub3 en el Maratón de Boston, y a María Gabriela Nutt, quien es una ducha corredora de 42k, a quien, dicho sea de paso, he tenido el honor y la dicha de acompañarla y/o coincidir con ella durante el trayecto en varios maratones.
Aprovecho esta entrada para comentarles y hacerles un breve resumen de lo que he hecho durante estas últimas semanas, ya que esta semana inicio mi plan de entrenamiento (de 16 semanas) para el Maratón de New York, plan que estaré compartiendo con ustedes semana a semana, así como mi evolución y expectativas. Por ahora les adelanto que mi meta es buscar un tiempo de 3h10.
Durante estas últimas 6 semanas estuvieron enfocadas en ejercicios pliométricos, combinados con trabajos en circuito cross-country (también conocido como corrida a campo traviesa), la idea era hacer una especie de trabajo de fortalecimiento o base, con entrenamientos de cuestas y subidas -llamados en el club catalanes- combinados con trabajos de velocidad.
Así que, como verán ya estamos de vuelta, esto me animara a compartir semana a semana con ustedes lo que será esta nueva experiencia y este nuevo plan de entrenamiento, a retomar de nuevo mi blog y por supuesto a subir las tres entradas pendientes de lo que fueron mis maratones números 32, 33 y 34.
Y es que lamentablemente los intentos que hice para correr en los maratones de Buenos Aires (octubre 2013), CAF-Caracas (febrero 2014) y Boston (abril 2014) no se pudieron concretar, aun cuando ya me encontraba inscrito en cada una de esas competencias.
En el caso de la CAF, debido a las manifestaciones originadas por la grave crisis política, económica y social que se vive en nuestro país, desde febrero de este año, situación que obligó a los organizadores del maratón posponer el evento hasta abril del 2015. Y, en el caso de los otros dos, lamentablemente, a los venezolanos se nos ha hecho cada vez más difícil conseguir divisas y boletos para viajar al exterior.
Esto
lo digo motivado a que desde hace más un año, adquirir boletos aéreos para
viajar a cualquier destino del exterior se ha puesto cuesta arriba, por la gran
deuda en dólares que el gobierno mantiene, actualmente, con las líneas aéreas.
De igual forma, la venta de boletos internacionales continúa paralizada entre un 80 y 90%, no hay pasajes disponibles para la gran mayoría de los destinos porque las tarifas están congeladas. Y para colmo, la mayoría de las líneas aéreas han disminuido la cantidad de vuelos internacionales desde Venezuela.
Las líneas aéreas han manifestado que no presentarán nuevas tarifas hasta que el Gobierno cancele la deuda completa. Así que, la reactivación de la disponibilidad de boletos aéreos solo será posible si el Gobierno cumple con el pago de la deuda, de eso dependerá la recuperación de las frecuencias perdidas y la reanudación de la venta de boletos en conjunción (pasajes para conexiones). Si el gobierno no cumple con eso, la situación seguirá igual.
A la luz de este panorama resulta insólito e increíble que para los venezolanos sea más fácil conseguir un cupo para correr el Maratón de New York que conseguir un boleto aéreo para viajar a esa ciudad; en mi caso me encuentro desde mayo, semana a semana, en una búsqueda exhaustiva para ver si consigo un pasaje aéreo para la ciudad de New York. Hay que estar pendiente casi “las 24 horas del día” para ver si las aerolíneas abren los cupos.
Muchos pasajeros compran directamente sus boletos con las aerolíneas, pero el pago es en dólares, otros viajan a sus destinos a través de conexiones con otros países, pagando también estas conexiones en dólares, pero no todos tenemos esa posibilidad.
En otro orden de ideas, durante este tiempo he tenido suficiente espacio y oportunidad para realizar grandes cambios en mi rutina, entre ellos la combinación de un nuevo método de entrenamiento. Y es que desde el mes de marzo me uní al Club de Corredores Cuatro Elementos, @4ElementosClub, dirigido por el experimentado Coach Orlando Velásquez, y de verdad les confieso que ya llevo cuatro meses con ellos y mi transición y adaptación ha sido fenomenal, me gusta el estilo de trabajo, los sitios donde entrenamos, las rutinas, el plan de entrenamiento y las personas que integran el team.
En términos generales, desde que comencé a entrenar con este club, cada día me siento mejor y súper agradado de pertenecer a esta gran familia de corredores, además, me siento muy feliz y motivado, y, mis condiciones ya comienzan a dar señales positivas sobre estos cambios.
Asimismo, el programa de entrenamiento que dirige Orlando se adapta al nivel de cada persona y de sus objetivos. Por estos motivos, lo recomiendo ampliamente, sobre todo para aquellos corredores que están entrenando sin dirección alguna, para los que desean prepararse para correr un maratón, para los que quieran dar los primeros pasos y tomarle el gusto a correr o en su defecto para aquellos que quieran mejorar sus marcas, acá encontraras esa asesoría y apoyo.
Adicionalmente, inicié un plan de acondicionamiento y mantenimiento físico, incluyendo terapias de masajes, con el profesor Nelson Plaza y por primera vez decidí probar y contar con la asesoría de un nutricionista deportivo.
Este
nuevo ciclo de entrenamientos implica que entrenaré prácticamente 7 días a la
semana, en vez de 3 o 4 como solía hacerlo regularmente. Ya NO correré en las
cintas del gimnasio, también llamadas bandas caminadoras o trotadoras, como
frecuentaba hacerlo durante estos 20 años.
Por supuesto las trotadoras quedarán como Plan B, para aquellos días que por las condiciones climáticas o por limitaciones de tiempo no pueda realizar mi entrenamiento con mi equipo. Aprovecho para comentarles que siempre vi a las trotadoras como una excelente opción, teniendo entre sus ventajas que no necesitas llevar un reloj para medir el tiempo o la distancia, puedes ajustar la distancia y/o el tiempo, el ritmo o la velocidad de acuerdo a las series que vayas a realizar, variar la inclinación, ver las pulsaciones, ver una película, escuchar musica y puedes correr en un ambiente tranquilo, privado y seguro.
Sé que para muchos correr en la cinta es realmente aburrido, también conozco a muchos buenos corredores, cuyos ciclos de entrenamientos son realizados casi por completo en estas bandas, entre ellos a Rafael Aznar quien lleva varios sub3 en el Maratón de Boston, y a María Gabriela Nutt, quien es una ducha corredora de 42k, a quien, dicho sea de paso, he tenido el honor y la dicha de acompañarla y/o coincidir con ella durante el trayecto en varios maratones.
Los
largos o trabajos de fondo que realizaba los días sábados, ahora serán los días domingos,
se acabaron los entrenamientos en montaña, y hay un cambio en mi horario de
entrenamiento, ya que durante la semana solía correr en las horas del mediodía,
ahora tocará el sacrificio de madrugar todos los días.
Aprovecho esta entrada para comentarles y hacerles un breve resumen de lo que he hecho durante estas últimas semanas, ya que esta semana inicio mi plan de entrenamiento (de 16 semanas) para el Maratón de New York, plan que estaré compartiendo con ustedes semana a semana, así como mi evolución y expectativas. Por ahora les adelanto que mi meta es buscar un tiempo de 3h10.
Durante estas últimas 6 semanas estuvieron enfocadas en ejercicios pliométricos, combinados con trabajos en circuito cross-country (también conocido como corrida a campo traviesa), la idea era hacer una especie de trabajo de fortalecimiento o base, con entrenamientos de cuestas y subidas -llamados en el club catalanes- combinados con trabajos de velocidad.
Dentro
de las tres últimas semanas realizamos un par de prueba, los fines de semana,
de 21km, que sirvieron de referencia para ver desde donde parto y la verdad es
que estoy mejor de lo que pensaba. El primero de ellos salió a un promedio de
4:57/km para un tiempo total de 1h43:57 en los 21km y los segundo 21km en 1h42,
asimismo hace tres semanas realicé mi primer chequeo de 10km obteniendo un
tiempo de 44:30.
Así que, como verán ya estamos de vuelta, esto me animara a compartir semana a semana con ustedes lo que será esta nueva experiencia y este nuevo plan de entrenamiento, a retomar de nuevo mi blog y por supuesto a subir las tres entradas pendientes de lo que fueron mis maratones números 32, 33 y 34.
Hasta
la próxima, nos seguimos leyendo y corriendo, RM
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